PSICólogo INFANTIl barcelona

Es una técnica terapéutica creada por Dora Kalff, discípula de Carl Gustav Jung.

Tenemos un espacio, la bandeja de arena, que puede ser seca o mojada. Yo tengo las dos, porque el niño/adolescente prefiere trabajar con una u otra, según la situación, el día, lo que quiere expresar... Tenemos luego muchas figuritas (personajes, animales, objetos, plantas, conchas, piedrecitas, canicas, etc.) que el paciente va a posicionar en la bandeja para construir lo que llamamos "su mundo".

El encuadre es casi totalmente libre: la única consigna es no volcar la arena en el suelo (siempre se cae algo de arena, a pesar de que la mayoría de niños son cuidadosos con esto: también nos pasa a los adultos en nuestras terapias. Si eres un terapeuta que usas caja de arena ¡siempre tienes que reservar tiempo para barrer al final del día!). Por el resto, el paciente puede ser totalmente libre en su creación y tampoco le empujamos a que hable sobre su trabajo. El terapeuta acompaña, escucha, refleja lo que ve de vez en cuando, registra sus sensaciones.....

La técnica de la caja de arena es muy potente, a pesar de que parezca tan simple que parece que "no se esté haciendo nada".

Es un trabajo muy primal: el paciente conecta con los cuatro elementos (tierra, agua, aire, fuego), presentes de manera real o simbólica (podemos poner velitas encendidas, verter agua, poner un espejo que representa un lago, crear una laguna donde posicionar un barco, poner pájaros encima de árboles....) dentro de un elemento, la caja, que de por sí mismo es CONTENEDOR y por ende tranquilizador y terapéutico.

No es una técnica interpretativa aunque es cierto que un terapeuta entrenado puede intuir determinada simbología y utilizarla para trabajar los temas del paciente. Sin embargo, lo más importante es el proceso que se despliega: a lo largo de varias sesiones, el contenido de la caja varía a la par de cómo varía el mundo interno del paciente y, por ende, su síntoma.

La técnica les gusta mucho a los niños porque les conecta de manera inmediata con elementos de juego (la arena, el agua, las figuritas) y porque les deja libertad de expresión, rebajándoles la ansiedad de responder a demandas (dibujar, de llenar fichas, de hablar) que a menudo, en terapia infantil, no facilitan una vinculación profunda porque además conectan con el miedo al "juicio".

Es una técnica muy potente, porque unas pocas sesiones de caja de arena pueden desatascar problemas y síntomas de manera mucho más fluida que la mayoría de las técnicas más verbales y más tradicionales.

Se integra perfectamente con el trabajo de terapia de juego del psicólogo infantil y con el modelo de terapia gestalt.